sábado, 22 de diciembre de 2012

Autoridades le suspendieron la boda de la gemela

Una jueza del sur de Argentina suspendió la boda de una joven con un hombre sentenciado a trece años de prisión como "partícipe necesario" en el asesinato de su hermana gemela, en 2010. Edith Casas tenía turno para casarse en la sureña localidad de Pico Truncado con Víctor Cingolani, que cumple condena por su participación en el crimen de Johana Casas.
Pero la jueza local, Graciela Zapata, suspendió la boda por una presentación judicial realizada por la familia de las gemelas.
La medida fue recurrida por la pareja y ahora la magistrada deberá expedirse sobre el polémico asunto.
En su escrito, la madre de Edith sostuvo que su hija "no se encuentra en el pleno uso de sus facultades, está privada de su razón y con peligro de su integridad física y psíquica" y solicitó a la Justicia se le realicen pericias psicológicas.
Como contrapartida, el abogado de Cingolani planteó que no existen "indicios", ni "pericias" que justifiquen la suspensión del casamiento, que ya había sido aprobado por la Cámara del Crimen.
En declaraciones a medios locales, la joven señaló que va a "defender" el casamiento y aseguró que durante el juicio que se siguió por el asesinato de su hermana gemela acusó a su futuro esposo de haberla violado en reiteradas oportunidades "por presiones de su familia". Desde la cárcel, Cingolani dijo que lloró la muerte de Johana como lloró la muerte de su padre. "Lo hice con el mismo dolor porque yo la quise", apuntó.
Además, diferenció la relación que tuvo con Johana de la que mantiene con Edith. "La relación con Johana fue algo menor. A Edith la amo, quiero formar una familia, tener hijos, vivir una vida normal como todo el mundo. Por eso voy a casarme", argumentó, tras asegurar que es "inocente".

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